Que haya sido el país invitado durante la pasada edición de Madrid Fusión, sólo evidencia lo que ya sabíamos: la cocina peruana está de moda. Pero no únicamente Perú, todo el eje andino tiene mucho que ofrecer a los paladares del mundo. Si aún no has tenido el gusto de probar sus ceviches, sus delicias derivadas del café o su famoso pisco, Virgilio Martínez, uno de los máximos protagonistas de la alta cocina peruana nos da tres buenas razones para enamorarnos del sabor del momento:
1. FUSIÓN DE CULTURAS.Las diversas migraciones del Perú, europeos (en su mayoría españoles), orientales y africanos, han aportado personalidad a la cocina andina. "La complejidad de este territorio empieza a ser comprendida ahora", explica aVanitatis el chef del restaurante Central en Lima. "Contamos con un legado de muchas culturas y muchos años, y esto se refleja en la profundidad de nuestra gastronomía, en el respeto por la naturaleza, en la modernidad, la ecología y el rescate del origen".
2. SABOR AUTÉNTICO. La cocina peruana se caracteriza por la riqueza de sus sabores, puros, sin aditivos. Bajo el título 'Perú, con mucho gusto', Virgilio ofreció una ponencia en el citado certamen culinario, donde dio debida cuenta de lo que no podemos dejar de probar si viajamos a este país. "En los países andinos hay que probar los tubérculos, toda la variedad de maíces y quinoas. Mi recomendación es que estos alimentos se prueben enteros y no procesados, pues son el mejor ejemplo de lo natural, lo nativo, de la propia expresión de la tierra". Al fin y al cabo, la 'papa' es "el verdadero aporte de Perú al mundo".
3. UNA COPA DE PISCO. El destilado peruano de bandera hace furor en nuestro país. "El pisco es especial por su proceso, por su origen y por lo que significa para los peruanos: mucha pasión, compromiso y amor por la tierra y por el trabajo", asegura Virgilio. Se trata de una bebida realizada a base del vino fermentado de ciertas uvas, y es especial por su versatilidad. Además, "la coctelería este año estará muy inspirada en el pisco", adelanta el cocinero.
Fuente:vanitatis.com