Para nadie es un secreto que la cocina es un arte, es el lugar donde los sabores, los suspiros y los secretos, así como también de las sorpresas, los colores y las memorias. El arte culinario también puede desencadenar ciertas tendencias gastronómicas, como es el caso de la comida negra, mejor conocida como 'black food'
Esta nueva moda de los alimentos 'oscuros' ha dado pasos importantes en este 2018, si bien data de años anteriores. Llegó y se instaló en las redes sociales como una tendencia atractiva y original, sobre todo, para los amantes de la gastronomía, también llamados 'foodies', que comparten sus creaciones a través de las redes sociales.
Pero, ¿cómo adquieren el color negro? Veamos, el principal ingrediente para lograr la tonalidad de estos platos es el carbón activado, un mineral que también se utiliza para blanquear los dientes, en mascarillas y para tratar enfermedades del estómago. Este, se mezcla con colorantes artificiales o bien, tinta de calamar.
Desmenuzando el proceso de coloración, el mineral se somete a altas temperaturas hasta carbonizarse y las cenizas resultantes se procesan con vapor hasta conseguir una estructura microporosa. A pesar de ser una nueva orientación culinaria, no todos son elogios a su favor.
Sus detractores aseguran, entre tantas cosas, que este colorante alimentario no aporta nada en lo nutricional, ni contribuyen a experimentar nuevos sabores o potenciar los ya existentes. Por el contrario, sus más acérrimos defensores, alegan las propiedades detox, ya que el carbón activado es un preparado farmacéutico que actúa contra las flatulencias.
Una publicación compartida de Fer’s Kitchen and More (@fersinski) el 10 Jun, 2018 a las 3:12 PDT
Ahora, el meollo del asunto está en que el carbón activado captura todas las moléculas a su paso, sin distinguir entre las perjudiciales y las que no lo son. En otras palabras, si ingieres un helado o un pan negro, el carbono arrastra calcio, potasio y demás nutrientes y los expulsa junto al carbón.
¿Otro ejemplo? A ver, puede restarle efecto a la píldora anticonceptiva si se toma antes de dos o tres horas de haber ingerido este mineral. "El carbón activado no discrimina lo que atrapa", señala José Miguel Mulet, profesor de Biotecnología en la Universidad Politécnica de Valencia.
Dicho de una tercera forma, puede llevarse los nutrientes de los alimentos o el fármaco que tomamos para combatir una enfermedad grave, por ejemplo.
La 'black food' es una tendencia innegable, sí; pero también es un tema para prestar bastante atención. Incluso, en Estados Unidos se debate si se debería advertir sobre estos efectos secundarios antes de servir la comida o bien, la bebida de color negro. Desde luego, todo queda a riesgo del consumidor.
Esta nueva moda de los alimentos 'oscuros' ha dado pasos importantes en este 2018, si bien data de años anteriores. Llegó y se instaló en las redes sociales como una tendencia atractiva y original, sobre todo, para los amantes de la gastronomía, también llamados 'foodies', que comparten sus creaciones a través de las redes sociales.
Pero, ¿cómo adquieren el color negro? Veamos, el principal ingrediente para lograr la tonalidad de estos platos es el carbón activado, un mineral que también se utiliza para blanquear los dientes, en mascarillas y para tratar enfermedades del estómago. Este, se mezcla con colorantes artificiales o bien, tinta de calamar.
Desmenuzando el proceso de coloración, el mineral se somete a altas temperaturas hasta carbonizarse y las cenizas resultantes se procesan con vapor hasta conseguir una estructura microporosa. A pesar de ser una nueva orientación culinaria, no todos son elogios a su favor.
Sus detractores aseguran, entre tantas cosas, que este colorante alimentario no aporta nada en lo nutricional, ni contribuyen a experimentar nuevos sabores o potenciar los ya existentes. Por el contrario, sus más acérrimos defensores, alegan las propiedades detox, ya que el carbón activado es un preparado farmacéutico que actúa contra las flatulencias.
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Ahora, el meollo del asunto está en que el carbón activado captura todas las moléculas a su paso, sin distinguir entre las perjudiciales y las que no lo son. En otras palabras, si ingieres un helado o un pan negro, el carbono arrastra calcio, potasio y demás nutrientes y los expulsa junto al carbón.
¿Otro ejemplo? A ver, puede restarle efecto a la píldora anticonceptiva si se toma antes de dos o tres horas de haber ingerido este mineral. "El carbón activado no discrimina lo que atrapa", señala José Miguel Mulet, profesor de Biotecnología en la Universidad Politécnica de Valencia.
Dicho de una tercera forma, puede llevarse los nutrientes de los alimentos o el fármaco que tomamos para combatir una enfermedad grave, por ejemplo.
La 'black food' es una tendencia innegable, sí; pero también es un tema para prestar bastante atención. Incluso, en Estados Unidos se debate si se debería advertir sobre estos efectos secundarios antes de servir la comida o bien, la bebida de color negro. Desde luego, todo queda a riesgo del consumidor.