Es llamado ‘superalimento’ por las muchas bondades que ofrece a la salud, además de sus efectos contra la anemia y el cáncer de próstata.
La algarrobina es un producto que proviene de la algarroba, el fruto maduro del algarrobo, muy usado en la gastronomía, especialmente en la preparación de jugos, cócteles y postres, dado que posee un sabor dulce muy agradable y con muchísimas proteínas, minerales y vitaminas esenciales en el desarrollo.
Entre sus muchas virtudes, además de su agradable sabor, podemos señalar además tiene propiedades energizantes, antidiarréicas, digestivas, antiinflamatorias, hepatoprotectoras, analgésicas, antioxidantes, antidiabéticas y diuréticas.
Potencia la reconstitución celular, combate la caída del cabello, debilitamiento de tejidos y contribuye a fortalecer huesos, gracias a que, además, es fuente natural de calcio.
Previene además la ansiedad, el nerviosismo y la depresión. Por su contenido calórico y proteico, equilibrando el cuerpo durante el crecimiento, manteniendo la densidad muscular y combatiendo la pérdida de tonicidad. Lo que le convierte en suplemento para niños de bajo peso o con dificultad para comer.
Incluso hay estudios científicos que aseguran que la algarrobina tiene cualidades anticancerígenas, gracias a su componente D-pinitol, presente en las semillas de algarroba. Los estudios plantean que la algarrobina previene y ayuda a combatir tipos de cáncer, en mama y en la próstata.
Niños y adultos pueden consumir este ‘superalimento’ de diversas formas. Durante el desayuno, en jugos o incluyéndolo en recetas de postres. Incluso, entre adultos, se ha popularizado por ser ingrediente imprescindible en ricos cócteles.Para los más pequeños, puedes hacer dulces de avena, merengadas o kekes, agregándole algarrobina para endulzar. Con tortillas o panqueques, quedan increíbles y con un sabor único ¡Inclúyelo en tu dieta! Y disfruta de todo lo que tiene que ofrecer.